En el Río Salado en el año 1974, había un 1° Cabo de Máquinas,
español de apellido Gago, que era todo un personaje. Medio malhumorado y
secote, con la particularidad que si bajaba sobrio a la guardia…… había que
seguirlo, porque era medio descuidado. En cambio, si previamente había tomado
algo…. fuertecito….hacía la guardia muy bien, responsablemente y conocía muy
bien el barco. Su genio, hacía que fuera especialista en “pincharle el globo” a
cualquiera.
Era la época del PRODE, y el mecánico, durante el almuerzo,
comenzó a decir:
“- Ah… si me gano el PRODE, lo primero que hago es cerrar un
buen cabarute”
“- Si me gano el PRODE me encierro en una habitación con
cinco minas en bolas”
“- Si me gano el PRODE, me compro un yate y lo lleno de
minas en bolas”
El gallego, se empezó a cansar, y sin levantar la vista del
plato le dice:
“- Dime… y si mientras tu navegas, la que se gana el PRODE
es tu mujer, se compra un yate y lo llena de machos en bolas…..”
… y siguió comiendo como si nada. El mecánico no habló más.
Otra.
Veníamos en viaje de bajada, y estábamos pasando frente a
Isla Lobos, en la costa uruguaya. Yo estaba en cubierta, mirando la costa y él
a mi lado. Le digo:
“- Mañana estamos en Buenos Aires. Por eso me gusta ver Isla
Lobos”
Me contesta, serio, como siempre:
“- Bah….. dentro de 10 días la verás de la otra banda”
y se fue.
Todo un personaje Gago....
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